Brayan Esteban Malaver Samacá, ciclista oriundo de Cómbita – Boyacá, que tuvo que hacer rifas, vender un cordero y una vaca para poder tener su primera bicicleta, le llegó la hora de recoger la cosecha de todo lo que ha sembrado con dedicación y esfuerzo.
Y es que gracias al apoyo de Monómeros, y de nuestra marca NUTRIMON, Brayan, una de las futuras promesas del ciclismo colombiano, viajará a Italia para hacer parte del equipo amateur Campana Imbalanig Geo&tex, con el que buscará darse a conocer y así lograr su gran objetivo, integrar una escuadra profesional UCI World Tour.
Desde muy pequeño, junto a sus padres Ernesto Malaver y Milena Samacá, y sus hermanos Daniel y Nicolás, este ciclista soñador, además de trabajar y cultivar su tierra, comenzó a participar en diferentes competencias donde fue protagonista con varios equipos, incluyendo el de Nairo Quintana en su momento, con quien, además, tuvo la oportunidad de entrenar.
En el campo, donde florece la papa y se cosechan los grandes deportistas de nuestro país, a Brayan le nació el amor por el ciclismo. Pedaleando por las carreteras de Boyacá, descubrió sus habilidades como escalador, su capacidad para llegar a lo más alto del podio en la clasificación de la montaña, figurando en las competencias por etapas.
Cuando tenía 17 años, viajó a Bogotá para acercarse a la cúspide de su sueño, mostrando su talento con la fundación Esteban Chaves. Con este equipo fue campeón nacional, ganó varias clásicas y se consolidó dentro de los mejores ciclistas juveniles del país. Su semilla comenzó a florecer en los años 2020 y 2021, cuando pudo competir en el Giro de Italia sub 23, una prueba que le ratificó sus condiciones, convirtiéndose en el mejor colombiano en la “corsa rosa” de esta categoría.
A sus 20 años de edad, Malaver buscará cumplir su sueño de conquistar el viejo continente en la temporada 2022 de esta competencia, un sueño que crece con NUTRIMON, su coequipero, el de su familia y el del campo colombiano, desde siempre. En esta ocasión, con NUTRIMON le apostamos a la meta de Malaver, joven símbolo del trabajo, disciplina y pasión por el deporte y la agricultura.
Pedaleando con el corazón, Brayan llevará por las carreteras de Europa los colores de la bandera colombiana, y en su mente tendrá siempre a su familia, al campo de su Boyacá, por la que seguirá luchando para darle un mejor futuro.